El concepto de «negocio en marcha» en las Normas de Información Financiera (NIF) en México es fundamental para la preparación de los estados financieros. Se refiere a la suposición de que una entidad seguirá operando en un futuro previsible, es decir, que no tiene la intención ni la necesidad de liquidar o reducir significativamente sus operaciones.
Principios del Negocio en Marcha:
- Suposición Básica: La suposición de «negocio en marcha» implica que los estados financieros se preparan bajo la premisa de que la entidad continuará operando. Esto afecta la valuación y presentación de los activos y pasivos, ya que se espera que la entidad podrá realizar sus activos y liquidar sus pasivos en el curso normal de sus operaciones.
- Evaluación Continua: Los administradores de la entidad deben evaluar de manera continua si existe alguna incertidumbre significativa relacionada con eventos o condiciones que puedan poner en duda la capacidad de la entidad para seguir como negocio en marcha.
- Revelación de Incertidumbres: Si existen dudas importantes sobre la capacidad de la entidad para continuar como negocio en marcha, estas deben ser reveladas en los estados financieros. Esto incluye la descripción de los eventos o condiciones que generan la incertidumbre y los planes de la entidad para abordar la situación.
- Cambio de Premisa: Si los administradores concluyen que la entidad ya no es un negocio en marcha, los estados financieros deben prepararse sobre una base diferente, generalmente una base de liquidación. Esto implica que los activos y pasivos deben ser medidos de manera que reflejen su valor en una situación de liquidación.
Importancia en la Práctica:
La suposición de negocio en marcha es crucial para los usuarios de los estados financieros, como inversionistas, acreedores y otros interesados, ya que influye en las decisiones sobre la valuación y presentación de activos y pasivos. Cuando esta suposición ya no es válida, la entidad debe proporcionar suficiente información para que los usuarios entiendan las razones y las implicaciones de esta situación en los estados financieros.
Este concepto es un pilar de la contabilidad, ya que garantiza que la información financiera refleje la realidad operativa de la entidad y permite tomar decisiones informadas.
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